La vuelta a casa del ídolo tan rápida no era la idea original ni de River ni del propio Gallardo, los malos resultados de la Michoneta, sumado al estrepitoso fracaso del muñeco en Al Ithijad posibilitan un regreso que ilusiona al mundo River.

El fracaso de Gallardo en Arabia, sumado al desconcierto del equipo de Martín Demichelis en el comienzo del semestre, posibilitó lo inesperado, la vuelta del muñeco a Núñez. El plan de River Plate era ganar la Libertadores con Micho, de ninguna manera volver a buscar al ídolo que decidió por su cuenta marcharse hace un año y medio, pero el DT formado en el Bayern no dio la talla esperada, entonces los hechos se precipitaron. Por su parte Napoleón quería ganar en Al Ithijad para dar el salto a Europa, por fin llegar a la elite de los grandes que juegan la Champions todos los años, su mala relación con Benzema sumado a una cantidad de derrotas inesperadas hicieron que lo echen con una indemnización millonaria, de un día para otro el DT más amado en River estaba libre otra vez, ese día se termino la paz para Demichelis, los fantasmas estaban al acecho otra vez  Al fin y al cabo, Gallardo sin trabajo, River sin rumbo futbolístico, con diferencias humanas en el vestuario, no hay mucho para discutir ni negocias, River lo necesita, el muñeco necesita a River para demostrar que está vivo como entrenador tras su mala experiencia en Asia, encima en 4 meses hay una posible y tentadora final de copa Libertadores en el mismísimo Monumental, nadie más que Napoleón merece esa partido, y a la vez nadie está preparado como él para dirigir ese partido en una olla a presión con 86 mil almas millonarias en la casa blanca del fútbol argentino. El amor esta en el aire, ahora regresa a Núñez.