El Racing de Gago si bien todavía no fue campeón, como los equipos de Cocca y Coudet, había encendido una gran ilusión en los hinchas, a fuerza de victorias y buen juego. De repente, todo parece sucumbir, naufragar. A la entendible eliminación con Boca por penales en semifinal de copa de liga, se sumaron dos derrotas de las feas, de esas que huelen y saben a verdadero fracaso, las de River de Uruguay en Sudamericana, y Agropecuario por la copa Argentina. Racing volvió a caer en Mendoza por la Liga, con Godoy Cruz que esta en zona de descenso, hay que frenar el tobogán descendente porque sino no para más...No creo que el problema lo resuelvan las incorporaciones de Vecchio o Maxi Romero, es una cuestión de conjunto, y sobre de todo de personalidad, atributo que no se consiguen en el kiosco de la esquina. En las situaciones límite, decisivas, a la Academia de Gago le faltó carácter para imponerse, actitud ganadora para continuar en ambas competiciones. Por eso la comparación con el pasado, más de la mala época racinguista, que de la brillante administración de Blanco. Lo que inclinará la balanza para uno u otro lado son los resultados, ver si este equipo cuenta con mística de campeón, o sólo se queda en promesas.