El presidente de Boca Juniors lisa y llanamente se tomó el viernes libre. Al mediodía fue al patio de su casa el presidente de la Conmebol, Alejandro Domínguez, junto a Chiqui Tapia a inspeccionar la bombonera....

El estadio que Román quiere agrandar pero nunca abandonar,  sin embargo el presidente de Boca no se hizo presente para tan importante visita, en su lugar dejó a Rosica para que sea el anfitrión que reciba a los invitados. Vaya uno a saber porque Riquelme está disgustado con Domínguez o con Tapia para cometer este desatino, semejante desplante, vaya uno a saber pero lo hizo. El jueves por la noche Jorge Brito recibió al 1 de la Conmebol en el palco de honor del Monumental para ver juntos el triunfo de River ante Nacional, el viernes por la mañana Víctor Blanco recibió al dirigente paraguayo con su hija en el estadio presidente Perón, todos con el objetivo de albergar la ansiada final de la Libertadores 2024, sin embargo Romy tenía cosas más importantes que hacer y no acude a la cita....

Por la noche Boca jugó un partido bastante importante en La Plata, a lo Pasarella el número 1 xeneize no fue a la cancha de visitante una vez más junto al primer equipo, que después del grosero error de Chuquito que sentenció la victoria pincha, deberá derrotar a Godoy Cruz para clasificar entre los primeros cuatro de la zona de la copa de la liga. Sos presidente de Boca y no participas de las dos cosas más importantes que le pasan a tu club el mismo día, no trates de entenderlo, Juan Román Riquelme.