De todas maneras, el principal responsable de este momento feliz en lo deportivo para el goleador, es Mauro Zárate, tozudo, a fuerza de voluntad, goles, talento, fuerza, y mucho, mucho carácter, se impuso en un equipo donde el capitán es Carlos Tevez, justamente con quien él pelea el puesto. Zarate está ganando la batalla, tanto, que hoy su nombre se pide para acompañar a Messi en la Selección. Algo novedoso está pasando en el Boca de Alfaro, el pueblo xeneize elige nuevos referentes, hoy se llaman Buffarini y Zárate, tal vez podamos agregar a Lisandro López y Andrada en un tiempo. Mauro es hoy la llave que abre los partidos a favor de Boca, cómo pasó ante Estudiantes de Río Cuarto, o quien los define, cómo ocurrió con Jorge Wilsterman. Su presente no se discute. Gruesa y para nada sencilla tarea, le resta al entrenador. Definir quienes acompañan a Zárate en el ataque de Boca. Su dupla con Wanchope funciona tan bien, que ábila es el otro goleador de Boca en lo que va del año. “El gordito que vive en off side”, lo definían hasta hace poco en el club. Benedetto es el nueve titular, pero deberá recuperar su mejor nivel, sino lo pagará. Pavón y Villa están parejos, si es por gusto personal, me quedo con el argentino. Creo que el fútbol de Reynoso no se discute, pero debe estar alerta, sigue siendo el más fácil de sacar. Qué hacer con Tevez? Esa es la pregunta del millón. Carlos, que está más veloz que en el 2018, más comprometido con la causa, deberá entender que no le toca ser titular todos los partidos, pero que su aporte puede ser decisivo, desde el banco no solo se puede ganar una copa, hasta un mundial, como nos pasó con Gotze. Lo que está claro es que Boca hoy es Zárate y 10 más, Gustavo Alfaro tiene la palabra.